Paseo a pie para disfrutar de la antigua Atenas.
Incluye el Museo de la Acrópolis y el tríptico antiguo de Atenas: la Acrópolis, el Ágora Antigua y el Cerámico.
Empezamos nuestro segundo agradable paseo a pie por la elegante calle peatonal de Dionisíu Aeropayitu, haciendo una parada obligatoria en el Museo de la Acrópolis, donde se pueden ver las copias de Fidias, las maravillosas esculturas arcaicas del siglo VI a.C., las cinco Cariátides originales del Erecteion, y en el último piso del museo se expone la preciosa decoración del Partenón (frontones y frisos). En esta misma calle peatonal, en la misma acera que el museo, en el número 21, se encuentra la sede de la Embajada de España en Atenas, edificio neoclásico del arquitecto alemán Ziller.
Enfrente del Museo se encuentra el teatro de Diónisos, el teatro más antiguo de Atenas y de toda Grecia, la auténtica cuna de la poesía dramática, y a continuación vemos el Santuario del Esculapio, Dios de la medicina, el hospital más antiguo de Atenas, y el Odeón de Herodes Ático, donde tienen lugar grandes representaciones musicales en los meses de verano. Le proponemos subir a la roca sagrada de la Acrópolis, símbolo de la civilización griega, y visitar los Propileos, el Templo de Atenea Niké, el Partenón y el Erecteion.
Desde la roca sagrada de la Acrópolis se ve el Areópago, Tribunal Supremo de la Antigua Atenas, donde predicó el Apóstol Pablo en el primer siglo de la era cristiana.
Una vez terminada la visita a la Acrópolis, a nuestra derecha se encuentra la colina de las Musas con el monumento funerario del benefactor Filópapo y a continuación la colina de las Ninfas, o Pnika, donde se celebraba en la antigüedad la famosa Asamblea ateniense. Entre ambas colinas, en la base, está la pequeña capilla de San Demetrio. Por el lado noroeste de la Acrópolis se encuentra la colina del Areópago, donde se celebraba el Tribunal Supremo de Atenas y donde predicó San Pablo. Siguiendo por la calle Apostolu Pavlu, a la derecha, se ve el Ágora Antigua de Atenas, cuna de la Democracia y corazón de Atenas antigua.
La calle peatonal de Apostolu Pavlu llega hasta el barrio de Thisíon (Cisíon). Allí se puede hacer una parada en la calle Iraklidón y sentarse en alguna de sus cafetería o bares, con vistas magnificas a la Acrópolis, para tomar un café, una copa o picar algo.
Continuamos nuestro paseo agradable por la calle Apostolu Pavlu hasta el final. A mano derecha está la calle Ermú, que dirige al antiguo Cementerio de Atenas, el Cerámico (Keramikós en griego), el cementerio oficial de los atenienses antiguos durante 1.500 años (1.100 a.C hasta final del siglo V de nuestra era), zona arqueológica abierta al aire libre con un museo muy interesante.
Así termina nuestro segundo día de paseo, lleno de riqueza cultural, artística, espiritual y culinaria.